Título: La Virgen del Tajo |
El lugar donde se ubica la ermita de la Virgen del Tajo concentra muchos elementos de interés arqueológico, histórico y etnográfico: La estratégica localización, la orientación del lugar, los restos anteriores a la construcción de la ermita, la leyenda que nos habla de una encina «vieja» donde se apareció la Virgen, las encinas renovadas para mantener la tradición y la subida en romería en torno al solsticio de verano.
(Ermita de la Virgen del Tajo y, junto a ella, «la encina vieja»)
Cuanto más antigua es una imagen y su lugar de culto más vinculados están a viejas leyendas piadosas. Cuentan que tras la invasión musulmana los camprovinenses se vieron obligados a ocultar la imagen de la Virgen en una encina. Pasados varios siglos, los cristianos se hicieron los dueños de estas tierras pero el recuerdo del lugar donde estaba oculta la Virgen desapareció. Un día estaba un leñador frente a una encina cortando leña cuando oyó una voz que le dijo:
Era la imagen de la Virgen que le avisaba que estaba allí oculta. En aquel lugar se construyó la ermita que desde entonces lleva el nombre de la Virgen del Tajo, en recuerdo a los tajazos que le dio el leñador a la encina.