Título: Jotas de ronda XI |
Los mozos de Muro de Cameros llevaron fama de muy musicales, pues no solo alegraban con sus instrumentos y canciones las calles y los bailes del fin de semana en Muro sino que acudían a pueblos vecinos con motivo de cualquier fiesta. Todos los mozos tocaban algún instrumento de cuerda y bajo la batuta del señor Daniel, que tocaba el laúd con maestría, animaban el discurrir de los días festivos.
Muro de Cameros se ha ido despoblando y de aquella gloria musical apenas queda nada más que el recuerdo. Victorino Tabernero, más preocupado por recuperar la melodía de las danzas procesionales y de recrearlas con su bandurria, aún se atreve a tocar la tonadilla de las antiguas jotas de ronda.
Con la licencia de Dios
y la del señor alcalde,
vamos a dar una ronda
sin hacerle mal a nadie.Por esta calle que vamos
echa sal y salen rosas
y por eso la llamamos
la calle de las hermosas.Las cabellos de las rubias
dicen que tienen veneno
aunque tengan solimán
cabellos de rubia quiero.Déjeme usted, señor cura,
dar un beso en esas manos,
que consagran y bendicen
y perdonan los pecados. (Al pasar por la casa del sacerdote)El amor y el interés
salieron al campo un día
y al amor, que tanto amaba,
el interés lo vencía.Portalillo la Marcela,
cuántas ligas habrás visto,
cuántos pecado mortales
habrás cometido a Cristo.Ya sé que han dicho tus padres
que yo para ti soy poco,
iremos a la chopera
y cortaremos un chopo.Asómate a la ventana,
cara de limón podrido,
que pareces a mi gallo
cuando está descolorido.Estabas en la ventana,
yo venía de regar,
te sonreí, me miraste,
¡qué fresco lo quies pillar!Toda esta calle adelante
la he sembrado de avellanas,
como no las he regado
todas me han salido vanas.El cura le dijo al ama
se acostara por los pies,
la grandísima puñetera
todo lo entendió al revés.Santiago con su caballo
a los moros perseguía
y yo te persigo a ti,
adorada perla mía.Vivan los quintos de este año
y los del año que viene,
sus padres y sus madres
y las novias si las tienen.Allá va la despedida,
la que no me gusta echar,
porque nunca me ha gustado
quedar con ninguna mal.Allá va la despedida,
la que echan en Alberite,
búscate una novia fea
pa que nadie te la quite.Allá va la despedida,
la que echan los de Alcanadre,
levántame la camisa,
verás qué culo más grande.