Título: Gerineldo IV |
–Gerineldo, Gerineldo, Gerineldito querido¡ay, quién pudiera esta noche dormir a solas contigo!–Porque soy vuestro criado os queréis burlar conmigo.–No, Gerineldito, no, que de veras te lo digoda tres vueltas por jardines y otras tres por el castilloy a eso de la media noche mis padres están dormidos–.Se metieron en la cama como mujer y maridotres horas duró la lucha y se han quedado dormidos.Sus padres que oyeron ruido al cuarto se han dirigidoy vieron a su hija infanta durmiendo con Gerineldo,el rey metió la espada en medio pa que sirva de testigo.–Despiértate, Gerineldo, despierta si estás dormidoque la espada de mi padre entre los dos se ha dormido.–¿Por dónde me tiraría para no ser conocido?–Vete por esos jardines que ahí encontrarás alivio–.–Gerineldo, Gerineldo, Gerineldito pulidosi antes eras mi criado ahora serás yerno mío–.
Magnífica es la interpretación de este romance por parte de Luz Divina, que lo hace con una melodía que podemos considerar como común en el ámbito riojano.
Bibliografía:
- Javier Asensio García, Romancero general de La Rioja, Piedra de Rayo, Logroño, 2008.