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Título: Aguinaldos de taberna I |
El sacristán y el cura,
qué par de pillos,
que tocan a las monjas
los limoncillos.Por la calle abajo
va el cura al trote
siguiendo a la criada
con un garrote.Dile a tu madre que calle
porque cuando abre la boca
les parece a los vecinos
que ha parido la lechonaPor dónde vas a misa
que no te veo,
por las escalerillas
del cementerio.
En La Rioja Baja, Ribera de Navarra y pueblos zaragozanos próximos al Moncayo se ha conocido y mantenido hasta tiempos recientes la costumbre de salir a pedir los aguinaldos navideños haciendo sonar ese sencillo instrumento de percusión llamado zambomba.
Como ya hemos dicho en una publicación, al ritual de los niños de pedir el aguinaldo se sumaron los mozos saliendo con las zambombas a rondar a sus novias. En este ambiente festivo se añade una nueva dimensión: habiendo trasiego de juventud por las calles y bares, las rondas con las zambombas están a un paso de convertirse en rondas de taberna, donde el sentido original del aguinaldo se ha perdido predominando en su lugar el canto lúdico y atrevido.
Estos aguinaldos que llamamos de taberna vienen con melodías sencillas y antiguas.
Los hombres de Fitero aún salen en tiempo de Navidad tocando las zambombas y cantando este tipo de canciones. Algunos guardan en las bajeras de sus casas los instrumentos que ellos mismos se hicieron hace muchos años. Manuel Frías, que fue guarnicionero toda su vida, construía originales zambombas. En el vídeo de Jesús Bozal podemos verle, hacia el minuto 4:30′, tocando una pequeña zambomba que él mismo se había pergeñado.
ttps://www.youtube.com/watch?v=B-UB7e_u5rI
Bibliografía:
- Jimeno Jurío, José Mª, Calendario festivo. II. Invierno, Pamiela, Pamplona, 2009.
- Javier Asensio García y Helena Ortiz Viana, La navidad riojana, Piedra de Rayo, Logroño, 2005.