Doña Plancha está metida
en un puchero de agua hervida,
que se muera, que se muera,
que se muera cuando quiera.
-¿De quién es ese ruido
que anda por ahí,
de noche y de día
no dejan dormir?
-Somos los ladrones,
que venimos a buscar
a doña Plancha,
que no está aquí,
que está en el jardín
cogiendo las flores
de mayo y abril-.

Las niñas de Autol cuando salían al recreo en la escuela cantaban y bailaban esta vieja canción de corro. A la que hacía de doña Plancha la dejaban en medio del corro, le quitaban la falda y se quedaba con la prenda que llamaban combinación. Doña Plancha preguntaba entonces «¿De quién es ese ruido…» y las demás niñas, alrededor de ella, respondían «Somos los ladrones…»
 
Bibliografía:

• Mari Cruz Garrido Pascual, El corro de las niñas, el círculo de las mujeres. Un repaso al juego del corro desde sus orígenes como elemento de la cultura femenina, Horas y Horas, Madrid, 2010.