Título: Cuento encadenado II |
Se trata de una retahíla poética cuyas frases encadenadas van envolviendo al oyente en una historia sinsentido y divertida.
Qué tiene, qué tiene la zarzamora,
que llora que llora
por los rincones,
que va robando los corazones.
La mora, la mora,
la mora madura es negra,
negro es el pañuelo de luto,
luto por quien luto ausenta.
Contentación tiene el pobre,
el rico tiene monedas,
la moneda siempre corre
y el que corre a tiempo llega
y al que al tiempo ha llegao muere
y al que se muere lo entierran,
lo entierran en los morgones,
los morgones uvas echan,
de las uvas sale el vino
que es lo que a mí me consuela,
suela la del zapato,
zapato que no es baqueta,
baqueta que no es badana,
badana pa forro es buena,
buena es la buena memoria
de lo que todo se acuerda,
cuerda la de san Francisco,
Francisco que no es Esteban,
Esteban es un santo mártir
a quien todos le rezan,
rezan los frailes maitines,
maitines no son completas,
completas no son tus mañas,
mañas tiene una hechicera,
hechicera es la que urde,
urde el tejedor la tela,
tela la del ceazo,
ceazo que harina cuela,
cuela la mujer que es limpia
y friega la que no es puerca,
las puercas paren lechones,
los lechones pacen hierba,
la hierba nace entre el trigo
y el trigo seco se siega,
siega el que no sabe nada
y el que nada en la mar entra,
el que en la mar entra muere
y vete, cristiano, a la iglesia.
Al salir de la iglesia
le cayó una oreja,
al salir del portón
le cayó un orejón.
Ésta y otra versión del mismo tema recogida en Ausejo son las dos únicas noticias que tenemos de este cuento en La Rioja. Puede considerarse una composición pararomancística por su rima constante en (éa).