El cuento del hombre que pierde y encuentra su propia chaqueta está muy extendido por toda La Rioja. En este caso viene con un añadido folklórico más: Para no pagar el impuesto de la alcabala entre Fitero y Valverde –en el portazgo que había entre Navarra y Castilla–, quienes intentaban pasar el vino de contrabando optaron por bebérselo antes de cruzar la muga.

Una vez más, los protagonistas son de nombre conocido, Melena y Galdino, aunque siempre lejanos en el tiempo.

La fotografía tomada en Cabretón nos muestra como ninguna otra la indumentaria de los hombres del campo, el aparejo de los bastos de una caballería y la inseparable bota de los campesinos de Cabretón -y de cualquier otro lugar- bastante más pequeña que los diez litros que llevaban Melena y Galdino en el garrafón comprado de vino en Fitero. Cortesía de Olga González.