Título: Jota de bodega |
Después del duro trabajo en el campo, los labradores se reunían de vez en cuando para «echar un trago y un bocao». Tras saborear unos tomates, cebolla fresca con sal y unos buenos tragos del porrón, los buenos cantadores de jotas empezaban a entretener el merecido descanso. Estas canciones también eran habituales en cualquier celebración, en tabernas, bodegas y en los chamizos, improvisados en los bajos de las casas y que, en las fiestas de la localidad, eran el lugar de encuentro y diversión.
Los caballos se mantienen
con cebada y con alfalfa,
los hombres con caparrones
y las mujeres con habas.
Localidad: Alberite |