Título: Canciones en la gira a Torremontalbo |
Una canción y una jotilla nos meten de lleno en la alegría romera:
Venimos de San Roque que que
de merendar.
Hemos comido lengua gua gua
y no podemos callar.Me han dicho que vas con Roque
a merendar al ribero
me ha dicho la peinadora
que te ha encontrado
hierba en el pelo.
Cualquier canción alegre podía sacarse a colación en el regreso de la romería, como la conocida de Antón, no pierdas el son o aquella otra que nos trae recuerdos de la francesada. Cenicero sufrió la presencia de tropas francesas y el trasiego continuo de soldados durante la Guerra de la Independencia.
Allá arribita en el alto, to
dispararon un cañón, pin pon.
Mataron a los franceses, ses,
hijos de Napoleón, pin pon.
Julián Yangüela, como otros hombres de Cenicero, tenía su arte tocando varios instrumentos rústicos: Pitos de ladrillo, flautillas varias, tejoletas -él las llama tablas- y cañas. También fue un buen poeta. En la fotografía lo vemos con las tablas en la mano, instrumento que en más de una ocasión tocó encima del carro, en el regreso de la romería a Torremontalbo.
Bibliografía:
- Félix Cariñanos San Millán, «La vida rural tradicional», en José Luis Gómez Urdañez (et al.) Cenicero histórico. Transformaciones económicas y cambios sociales en una ciudad riojana. Ayuntamiento de Cenicero-Comunidad Autónoma de La Rioja. 1987.