Riojarchivo

 

Título: Gozos a la Virgen de Tres Fuentes
Clasificación: Cancionero religioso
Localidad: Valgañón
Informantes: Agustina Crespo Sáez (28-8-1902) y su hija Paula Crespo Crespo (26-6-1936)
Recopilador: Javier Asensio García
Lugar y fecha de grabación: 4 de agosto de 1999

 

La iglesia de las Tres fuentes de Valgañón es uno de los santuarios más antiguos de La Rioja, sito en un lugar ameno. Su origen está envuelto en una piadosa leyenda, según la cual la Virgen se apareció a una pastora llamada Inés en la dehesa de la villa, un monte cercano a las fuentes. Al enterarse el rey Fernando III, El Santo, se acercó hasta allí junto a su mujer y el obispo de Burgos para consagrar el templo. Corría el año 1224.

A ella acuden en devoción las gentes de Bañares -el 28 de abril- con la escusa de que guardan un Cristo que camino de Burgos a Bañares se hizo pesado y no hubo manera de llevarlo a su destino. También los de Santo Domingo de La Calzada porque a la hora de construir la catedral se llevaron la madera de Valgañón, a condición de poner tres plantones por cada árbol cortado.

La iglesia ha estado muy vinculada a la cercana dehesa comunal. El día de San Isidro los vecinos acuden en romería a Tres Fuentes y sueltan las vacas en la dehesa. Desde la iglesia suben hasta el pastizal de Anguta donde, hasta hace unos años, se organizaba una lucha de toros en la que el vencedor se reservaba para semental o padre de la vacada, costumbre racial y brava donde se cruzaban apuestas y, como vemos en la fotografía, los vecinos -y hasta los niños- contemplaban la pelea a escasa distancia.

Las bondades que la hierba de la dehesa de Anguta proporciona al ganado son proverbiales. En el año 1827, Baltasar de Untoria, un poeta local, escribía lo siguiente:

Hay una dehesa famosa
cerca del pueblo de Anguta
que su hierba es sin disputa
en sumo grado sabrosa.
Es también tan sustanciosa
que en diez días el ganado
aunque esté deteriorado
si de su hierba ha comido
se pone gordo y lucido
y en el más robusto estado.


luchatoros

Fotografía: Cortesía de la Asociación Virgen de las Tres Fuentes.

En otros tiempo hubo danza procesional, que los mayores de Anguta conocieron. En el año 1772 se escribió una comedia en la que un personaje animaba a los danzadores a subir a la dehesa para celebrar la aparición de la imagen:

Júntense las Cofradías
con sus pendones y cirios;
Alcalde, los danzadores,
aunque sean mal vestidos,
acudan luego a la dehesa…

También los vecinos de Santurdejo y Grañón acudían en rogativa “por voto de villa y según costumbre antigua”, tal como figura en el catastro del Marqués de la Ensenada hacia el año 1746.

La vieja copla tradicional de la aparición de la imagen de la Virgen en la dehesa:

La Virgen de las Tres Fuentes
no es comprada ni es vendida
es bajada de los cielos
y en la dehesa aparecida

dio pie para componer unos gozos a la Virgen en los que no faltan alusiones a San Antonio y que los vecinos de Valgañón cantaban en la fiesta de su patrona. En la iglesia hay una imagen de este santo casamentero y era costumbre –trenes cargados de mozas con ganas de boda llegaban a Ezcaray desde Haro– que las mozas casaderas acudieran en romería el 13 de junio para dar siete vueltas alrededor de la iglesia, beber agua del caño de en medio, sin apoyarse, y pisar un ladrillo, para así conseguir novio.

Bibliografía:

  • Francisco López Rivera. Comedia nueva: Nuestra Señora de Tres Fuentes, que se venera en la villa de Valgañón, año de 1772, copia manuscrita conservada en el I.E.R., M/445.
  • Germán Miguel de los Santos González Untoria, Santa María de Tresfuentes. Aportaciones a la historia de Valgañón, edición del autor, Logroño, 2003.