Una mujer quería encontrar marido a toda costa e iba todos los días a pedirle a San Antonio, el santo casamentero:

San Antonio bendito,
ramo de flores,
a las que no tenemos
damos amores

El sacristán, dándose cuenta de su insistencia y la fe que tenía la chica, se puso detrás de la imagen del santo y le respondió:

Cásate con el sacristán
que es un buen mozo y galán.

Pero el marido le salió malo. Entonces fue la madre de la chica a vengarse e insultar al santo:

San Antonio bendito,
cara de cuerno,
como tienes la cara
me has dado el yerno

Bibliografía:

• Javier Asensio García, Cuentos riojanos de tradición oral, Piedra de Rayo, Logroño, 2004.
• Javier Asensio García, Los 99 mejores cuentos de la tradición riojana, Piedra de Rayo, Logroño, 2012.
• Antonio Lorenzo Vélez, Cuentos anticlericales de tradición oral, Ámbito, Valladolid, 1997.