Título: La flor de malva en la mañana de San Juan |
Vieja costumbre de hábitos familiares en la mañana de San Juan que consistía en recoger unas ramitas de malvas florecidas; al acabar de comer se echaban sobre las migas sobrantes de pan y todo junto se guardaba en una bolsa de lienzo. En la Nochebuena, después de cenar, se abría la bolsa y allí estaban las flores, tan frescas y coloridas como la mañana en que se cogieron.
Para dar más vistosidad al momento algunos adultos daban el cambiazo: en diciembre no es raro ver malvas floridas y poco costaba llevarlas a la mesa con discreción y meterlas en la bolsa de tela. Además, la infusión de flores de malva, especialmente las cogidas en la mañana de San Juan, eran un remedio natural y efectivo contra los catarros.
Sabemos que la costumbre de las flores de malva entre los dos solsticios ha sido practicada en el País Vasco, Navarra, La Rioja y el norte de Soria.
Bibliografía:
- Jesús Callejo, Historia mágica de las flores, Ediciones Martínez Roca, Barcelona, 1999.