Título: La alondra y la merienda del pastor |
Los aláudidos –alondras, cogujadas, totovías, etcétera-, tienen un canto característico y continuo. A la alondra se la ve en primavera subiendo en un vuelo ascendente y vertical mientras no ceja en sus trinos. Los pastores han agudizado su ingenio y su oído para interpretar qué les dice el pájaro: parece que se ríen de la poca merienda que llevan en el zurrón.
–¡Pastor, qué poca merienda traes y qué largo es el día!
–Tira, tira, tira, tira, tira.
Cacho llaman en Pazuengos a la alondra cantarina.
Bibliografía:
- Javier Asensio García, Los 99 mejores cuentos de la tradición riojana, Piedra de Rayo, Logroño, 2012.
Hay una versión similar a ésta recogida en Santa Cruz del Valle Urbión.