Título: Cura de la sarna en la mañana de San Juan |
En Autol, como en la mayoría de los pueblos de La Rioja, era costumbre de los mozos salir a desayunar al campo en la mañana de San Juan. En esta localidad solían ir a un término que le llaman El Prado, junto al río Cidacos. La noche de San Juan, al dar la primera campanada de las doce, el agua del río adquiría propiedades sobrenaturales. Margarita recuerda cómo esta agua sanjuanera les quitó la sarna a ella y a su marido que, tras acabar la guerra civil, había regresado aquejado de esta enfermedad de la piel.