Título: Cantos de Pascua en Vadillos
Clasificación: Cancionero
Localidad: Vadillos de Cameros
Informantes: Vecinos de Vadillos
Recopilador: Helena Ortiz Viana y Julián Tomás Las Heras
Lugar y fecha de grabación: Vadillos de Cameros, 4 de abril de 2010
Las albricias o aleluyas son celebraciones frecuentes en España. En nuestra región pueden encontrarse en Villavelayo, Neila, Manzanares, Garganchón, Ventrosa de la Sierra, Canales, Brieva, Huerta de Arriba, Santa Cruz del Valle Urbión, San Asensio. Son cantos de júbilo para celebrar la resurrección de Cristo.
Se trata de una celebración religiosa de carácter tradicional en la que los fieles son los protagonistas. Los cantos de las mujeres sirven de guía de la procesión y misa de Pascua, incluso dirigen al sacerdote: Salga, salga, señor cura, salga de la sacristía, salga a celebrar la misa que así lo requiere el día.
Bellos versos y sencillas metáforas las de estos cantos populares:
¡Oh, qué mañana de Pascua, oh, qué mañana de flores,
oh, qué mañana de Pascua ha amanecido, señores!
¡Oh, qué mañana de Pascua, Pascua de Resurrección
que hasta las aves que vuelan gozan vuestro resplandor!
Ya se reúne la gente, las insignias y el pendón
con la princesa María vayamos de procesión.
Alzad, doncellas, la Virgen, alzad si queréis alzad
que con su divina gracia, ella nos ha de ayudar.
Sacristán, abre las puertas, las llaves y los candados
que va la Virgen María en busca de su hijo amado.
Váyanse por ahí los hombres con el lucero del día
y por aquí las mujeres con la princesa María.
¿Dónde llevamos la Virgen? A dar vueltas por la iglesia,
donde a Jesús encontremos le hagamos la reverencia.
¿Qué es aquello que reluce que viene la calle alante?,
es el lucero del día que viene a ver a su madre,
que no se han visto los dos desde el Jueves por la tarde.
Quítale a María el manto y ese velo tan pesado,
no es menester que lo lleve que su hijo ha resucitado.
Quítale a María el manto quítale a María el velo,
quitádselo las casadas, las doncellas no podemos.
Ya ha resucitado Cristo, señores, eso no hay duda,
ya ha resucitado Cristo, cantemos el aleluya.
¿Qué es aquello que reluce debajo del campanario?,
ni es estrella ni es lucero que es la Virgen del Rosario.
Entrad, amiguitas mías, con amor y melodía
casa que habita Jesús y también Santa María.
Salga, salga, señor cura, salga de la sacristía,
salga a celebrar la misa que así lo requiere el día.
Salga, salga, señor cura, vestido de humanidad
que al mismo Dios representa, que a decir la misa va.
Ya se quita la casulla para ir a predicar,
estad atentos, devotos, para poderle escuchar.
Ya se ha acabado la misa cantada con devoción,
blanca paloma sin mancha, échanos la bendición.
Boca de ángel ha tenido el señor predicador,
a la hora de su muerte Dios le dé la salvación.
Ya se ha acabado la misa y a los cielos ha subido,
los ángeles la han cantado, nuestro Dios lo ha recibido.